Para aportar al crecimiento, quitar peso, aclarar la copa, retirar ramas que han descendido y por seguridad, son algunas de las razones que conllevan al trabajo de mantenimiento que se realiza al arbolado del cantón. Esta acción se efectúa bajo programación o por pedido de la comunidad.
Ciudadela Universitaria, Los Laureles de San Mateo, redondel de Los Bomberos, La época y Santa Martha han sido parte de los sectores que se han atendido con mantenimiento de poda y control desde el área municipal de Parque y Jardines.
Pero, ¿cómo se define qué tipo de poda se debe aplicar y bajo qué circunstancias?
En el caso de mantenimiento por limpieza se cortan ramas mal dirigidas, ramas secas, enfermas, rebrotes de raíz y chupones que nacen en el tronco.
En la poda de formación, aclarado o por seguridad se brinda conducción a las ramas primarias y secundarias de los árboles. También permite elevar la copa del ejemplar, para no interferir con la circulación peatonal y vehicular. Esto ayuda al crecimiento ordenado del árbol.
Y, la poda profunda se realiza bajo análisis técnico ambiental. En estos casos se evidencia que la copa del árbol es muy alta o frondosa y presenta inestabilidad, representando un peligro para quienes circulen por el sector. También existen casos de cableado eléctrico cercano o por evidenciarse que su ciclo de vida ha llegado a su fin.
En lo que va del año se han podado casi 150 árboles en más de 100 sectores de las parroquias urbanas y rurales de Manta. Varios de estos lugares son en parques, calles y avenidas donde están plantados los árboles.
La ciudadanía puede solicitar el mantenimiento del arbolado público a través de las plataformas digitales MantaApp o Portal Ciudadano.