Una tarde de emociones y amorfinos se vivió en el poblado rural de Pacoche Arriba de la parroquia Santa Marianita al sur de Manta, donde una calle de hormigón rígido permitirá que decenas de niñas y niños se trasladen a la escuela Sucre número 10.
Para el pequeño Neicer Calderón es un alivio saber que cuando retorne a clases presenciales ya no será un problema el tipo de calzado que utilice. “Antes teníamos que venir en botas, ya que cuando llovía los zapatos se nos ensuciaban. Ahora podremos estudiar sin obstáculos”, mencionó sonriente Neicer durante el acto de inauguración de esta obra.
Al igual que él, la niña Carolina Pinargote dijo estar agradecida con Dios y con el alcalde Agustín Intriago. Ella sostuvo que con esta nueva calle los padres de familia podrán acceder y acompañar a sus hijos sin tener que pasar peripecias, como cuando este camino era de pura tierra.
El alcalde Intriago hizo hincapié que, a pesar de las complicaciones económicas y la pandemia, se ha llegado con mucho esfuerzo a cada parroquia y, principalmente, a los sectores donde la obra no existía hace décadas. “Creamos un futuro para nuestros hijos, para que ellos tengan la oportunidad de crecer en mejores condiciones de las que a nosotros nos ha tocado vivir”, mencionó.
Cristóbal Reyes, presidente de la comuna ancestral Pacoche, sector situado a cerca de 30 minutos del centro de Manta, festejó la entrega de la obra con amorfinos y afirmó que por más de 20 años se ha necesitado esta vía. Allí se construyó por primera vez una calle de hormigón (bajo el proceso técnico adecuado), una red de drenaje de aguas lluvias, 4 pozos de revisión, aceras, un muro de contención para protección de la escuela y el talud y una escalinata para conectar la calle con la escuela.
La Alcaldía Ciudadana reafirma su compromiso de trabajo en la zona rural de Manta.
